El Ayuntamiento de Allariz se ubica en la mitad occidental de la provincia de Orense, ocupando una extensión de 85,96 km². Su villa se compone de un conjunto urbano interesante dentro de Galicia, la cual mereció en 1971 la declaración de Conjunto Histórico Artístico.
Su Casco Histórico, ofrece un buen estado de conservación, gracias al esfuerzo rehabilitador de los últimos años, trabajo que se ha visto recompensado con el Premio Europeo de Urbanismo por el proyecto de Recuperación Integral del Conjunto Histórico-Artístico de Allariz y de su río Arnoia, en 1994.
La vida local tuvo su origen en el castro que domina el discurrir del Arnoia, cruzado por caminos estratégicos. El topónimo de Allariz nos remonta al siglo VI cuando la presencia sueva en la comarca crea la “Vila Aliaricii”.
En el siglo XI Alfonso VI hace levantar el Castillo y las murallas. En el siglo XII Alfonso VII le concede a la Villa el famoso Fuero que la convierte en Villa Real. Sancho IV nombró a la villa de Allariz como “Llave del Reino de Galicia”, al mismo tiempo que en extramuros crecía una importante colonia judía.
Aquí se educó Alfonso X el Sabio; aprendió el gallego ya que su dialecto el portugués se hablaba ya en el vecino reino lusitano desde su evolución a partir del nieto del primer monarca portugués don Afonsso Henriques1 que luego le permitió utilizar en algunas Cantigas compuestas en su scriptorium y, al menos diez de ellas, seguramente debidas al mismo rey.
La participación de Allariz en la guerra “irmandiña” y la fundación del Hospital son los hechos más destacados del siglo XV.
Entre los siglos XVI y XVII se construyen numerosas casas hidalgas, se colocan los cuatro Cruceiros de la Villa, se funda el Pósito Agrícola y empieza una serie de guerras con Portugal que continúan en el siglo XVIII por la cuestión sucesoria. En este mismo siglo, un incendio destruye parte del Convento de las Clarisas que se reedifica.
El siglo XIX comienza con la ocupación de las tropas napoleónicas y prosigue con la desamortización de mediados de siglo que supuso el desmantelamiento del Castillo y que culmina con la desaparición del puente de la “Zapateiría” y buena parte de los tramos amurallados. En 1900, la Villa vive momentos de prosperidad, llegando a tener 10.000 habitantes. El lino era la principal ocupación con más de 50 talleres. La decadencia de esta actividad coincide con el auge del curtido del cuero, principal actividad hasta principios de los 60.
Desde entonces, se produjo una decadencia económica y demográfica de la cual Allariz ha resurgido en los últimos años.
Recientemente, una publicación catalogó a Allariz como uno de los lugares más bonitos de Galicia. Sin duda, razón no le falta; ni a ellos por declararlo como tal, ni a ti por elegirlo para tu blog.
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